domingo, 25 de enero de 2015

Cuando a ceder le llaman negociar, al diálogo le llaman monólogo (parte I)

La maquinaria se ha puesto en marcha. Como esas viejas locomotoras a vapor que empezaban su marcha poco a poco e iban cogiendo velocidad. Hay que negociar... el Comité es inmovilista... el Comité no hace propuestas.. la culpa es del Comité.

Os acordáis cuando el Gobierno decía que vivíamos por encima de nuestras posibilidades, que la cosa estaba muy mal, que la culpa era de la herencia recibida y de Zapatero, que nuestra economía no era competitiva, que después de una medida sangrante, cuando ya parecía que al Gobierno le llegaba, venía otra más (subida del IRPF, subida del IVA, cambio de la reforma laboral, recortes...), ¿os acordáis a quien afectaban estas medidas?, a los ricos no, y nos recuerdan que las cosas aunque salgamos de esta crisis no volverán a ser como antes. Esto lo hemos escuchado y nos lo hemos merendado todos los días durante estos años y nos lo seguimos merendando. Pues bien, esta situación es perfectamente extrapolable, como un calco, a la situación en Povisa.

Silveira (el gobierno), en una reunión hace unos años, le dice a sus trabajadores/as (ciudadanía) que el Convenio (herencia recibida) es caro, que hay ciertos colectivos que no son competitivos (como la economía) y que nuestro Convenio tal como lo conocemos tiene que desaparecer, que será otro que no puede ser como el de antes (aunque salgamos de la crisis las cosas no van a ser como antes). Así que empieza a tomar una serie de medidas (como el Gobierno), que no gustan a los/as trabajadores/as (ciudadanía) como: reducciones de jornada, modificaciones de turno, incumplimientos de convenio, incumplimiento de sentencias, amenazas, despidos...) y que afectan sobre todo a ciertos colectivos:celadores, auxiliares, limpieza...etc (como las medidas que el Gobierno adoptó que sabemos tod@s a quien afectaron y a quien no). Precisamente en Povisa esas medidas (ajustes que diría el Gobierno) afectó a los colectivos que, para Silveira, no eran competitivos mientras que Silveira (el Gobierno) se lucró y aumentó sus beneficios (cabe recordar que cuando la empresa dijo que tenía pérdidas el consejo de Administración se subía el sueldo o que este último año Povisa ha sido la empresa del grupo Nosa Terra que más beneficios ha tenido).

Parece que hay semejanza entre ambas situaciones. Con la situación del Gobierno, la tendencia, parece ser, que es el cambio, la ciudadanía ha mostrado su cabreo en las calles y parece que lo va a hacer en las urnas, para poder cambiar al Gobierno y la situación . Sin embargo, en Povisa la maquinaria está en marcha, los ciudadanos no deben protestar sino ceder, la situación no debe cambiarse o sólo se cambiará si cedemos más derechos todavía (Nuestro Convenio vamos)  porque en Povisa la culpa sigue siendo de Zapatero (el comité), no del Gobierno que genera esta situación.

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